La Comunidad Organizada tiene dos lecturas posibles: Como sistema social a construir; y como sistema de poder.
Como sistema social; sostiene que el pueblo suelto, aislado, atomizado, no existe. Sólo existe el pueblo organizado y como tal se transforma en factor concurrente en los aparatos del estado que le son específicos a cada organización del pueblo.
Como sistema de poder, sostiene que el poder procede del pueblo que se expresa a través de sus instituciones intermedias. Ni el poder procede del gobierno, ni del Estado. Ni el pueblo delega su poder en las instituciones del Estado.
Estas dos lecturas constituyen el círculo hermenéutico que explica la idea de Comunidad Organizada. El pueblo como pueblo organizado crea un sistema social que genera un poder político real, (no virtual como la parodia democrática: “Un hombre igual a un voto”) que le permite la recreación permanente de un sistema social para el logro de la «buena vida».
El presupuesto ideológico de la Comunidad Organizada es su populismo que consiste en:
1) considerar al pueblo como fuente principal de inspiración.
2) Término constante de referencia y…
3) depositario exclusivo de valores positivos.
Mientras que la crítica política que se desprende de la Comunidad Organizada es que las instituciones formales del Estado demo-liberal no alcanzan, no son suficientes para expresar las demandas auténticas de los pueblos.
Alberto Buela
Nacido en la ciudad de Buenos Aires (Argentina) en 1946, se licenció en Filosofía por la Universidad de Buenos Aires, en 1973, y obtuvo el doctorado en la misma disciplina por la Universidad de Paris-Sorbonne, en 1984. Ha trabajado cuatro temas específicos: la metapolítica, la teoría del Disenso, la teoría de América como lo hóspito y la doctrina de las virtudes. De formación clásica, su filosofía es el resultado de un pensamiento situado en América con fuerte influencia de la fenomenolgía de Max Scheler y el existencialismo de Martín Heidegger. En la filosofía práctica se nota la influencia de Carl Schmitt así como el comunalismo de Saúl Taborda y la del nacionalismo popular iberoamericanos con autores como el nicargüense Julio Ycaza Tigerino y el brasileño Gilberto Freyre. Se destaca como el fundador de la metapolítica en América. Sus trabajos al respecto son múltiples y variados: Qué es metapolítica; Metapolítica y tradicionalismo; El katechon como idea metapolítica; Algo más sobre metapolítica, Metapolítica de lo social, etc. Ha publicado más de 200 artículos académicos fuera de su país y más de una veintena de libros, tanto sobre filosofía clásica y contemporánea como sobre política, geopolítica y metapolítica. Su pensamiento se apoya en autores clásicos como Platón y Aristóteles, en autores contemporáneos europeos como Scheler, Heidegger y Bollnow, y en americanos como MacIntyre, Wagner de Reyna, Nimio de Anquín y Saúl Taborda, entre otros. Como propulsor en América del estudio de la metapolítica, en tanto interdisciplina que estudia las grandes categorías que condicionan la acción política, ha propuesto la Teoría del Disenso, a contrario sensu de la Escuela de Frankfurt. Ha sido fundador y director de la revista Disenso desde 1994 a 1999. Entre las más de 20 obras que ha escrito podemos destacar: El ente y los trascendentales. Bs. As., Cruz y Fierro, 1972; El ente: Manifestación y Conocimiento, Bs. As., Marcos, 1975; Hegel: Derecho, Moral y Estado. Bs. As., Depalma, 1985; El Fundamento metafísico de la ética en Aristóteles, Ed. Cultura et Labor, Bs.As., 1988; Hispanoamérica contra Occidente, Ed. Barbaroja, Madrid, 1996; Ensayos de Disenso, Ed. Nueva República, Barcelona,1999; Metapolítica y filosofía, Ed.Theoría, Buenos Aires, 2002; Disyuntivas de nuestro tiempo, Ed. Barbarroja, Madrid, 2012; Notas sobre peronismo, Ed. EAS, Alicante, 2017.
Ver todos los libros del autor