Referencia a «El Marxismo no es de Izquierdas» en Tradición Viva

El socialismo sin careta

el PSOE sigue «desmontado el armazón del sistema de derechos de los trabajadores», sigue destruyendo el legítimo patrimonio familiar manteniendo e incrementando impuestos expropiatorios.

Por Carlos Pérez- Roldán y Suanzes

Refiere don Francisco José Fernández- Cruz Sequera en el prólogo a la obra de don Carlos X. Blanco  «El Marxismo no es de izquierdas» que «los sucesivos gobiernos del PSOE, han desmontado el armazón del sistema de derechos de los trabajadores, enajenando con su privatización el sector público español, el poderoso grupo financiero e industrial del Estado, lo que estamos pagando claramente en este mismo momento con la factura eléctrica, han destruido el sistema educativo, verdadero ascensor social en España, terminando con cualquier movilidad interclases, han impuesto las políticas neoliberales subordinando lo político a lo económico, el trabajo al capital y a la usura bancaria, las políticas de identidad de las minorías religiosas que contribuyan a la creación del vacío espiritual de los españoles, las raciales que rompen la realidad biológica de España y las llamadas “políticas de género” en lo social, terminando por destruir la célula viva de la sociedad y de la clase trabajadora que es la familia. Todo lo anterior, junto con la potenciación de las políticas de identidad de los territorios y los poderes de la periferia geográfica, han debilitado el Estado y a la sociedad española provocando una profunda división en todos los órdenes, destruyendo la unidad cultural, moral, racial y el sentimiento nacional unitario». En el mundo jurídico decimos que lo notorio no necesita prueba, y notoria resulta todo lo afirmado por don Francisco José Fernández- Cruz.

No obstante, y como lo evidente no resulta evidente para todos, resulta necesario reparar en la convalidación ayer 28 abril del Real Decreto-ley por el que supuestamente se adoptan medidas urgentes en el marco del Plan Nacional de respuesta a las consecuencias económicas y sociales de la guerra en Ucrania, y decimos supuestamente por cuanto la guerra de Ucrania no ha producido graves consecuencias económicas, sino que más bien ha sido la desproporcionada respuesta de Estados Unidos, y sus títeres europeos, imponiendo sanciones draconianas a Rusia, y armando imprudentemente al clan de Zelensky, lo que está perturbando la economía del pueblo, que no de las altas finanzas, ya que estas, como en todo conflicto bélico se siguen enriqueciendo a costa del desposeído pueblo.

El ministro de la Presidencia, Relaciones con las Cortes y Memoria Democrática, Félix Bolaños, ha defendido en el Congreso las medidas que han contado con el apoyo de las izquierdas y los nacionalistas (PSOE, Unidas Podemos, PDeCAT, Más País, Compromís, Nueva Canarias, Teruel Existe, Partido Regionalista de Cantabria y BNG), y ha llegado a afirmar que las mismas tratan de «proteger y ayudar a los españoles frente al impacto de una guerra en las puertas de la Unión Europea» asegurando que «la receta de este Gobierno es proteger y ayudar a personas y empresas fortaleciendo el estado de bienestar y profundizando en la modernización de la economía avanzando en la digitalización y la transición ecológica», es decir reconociendo que las medidas propuestas profundizan el camino de la subordinación económica de España a los grandes capitales. 

Efectivamente, un rápido análisis de las medidas propuestas permite constatar como el pueblo español ha vuelto a ser relegado para proteger los grandes intereses financieros, y se ha profundizado en la expropiación económica de las familias españolas. Así, por ejemplo, entre las medidas en el ámbito energético se mantiene una ficticia rebaja fiscal en la factura de la luz sin adoptar ninguna medida tendente a conseguir la independencia energética de España, como podrían ser explotar los yacimientos petrolíferos y de gas tanto en las Islas Canarias, como en Ayoluengo (Burgos), en el mar Mediterráneo, golfo de Valencia, mar Cantábrico, valle del Guadalquivir y golfo de Cádiz, o apostar por las centrales nucleares y la energía hidráulica.

En cuanto a las medidas en materia de transportes el gobierno socialista sigue apostando por expropiar a las familias mediante desproporcionados impuestos para repartir ayudas directas a las empresas transportistas, y además sin reparar en la titularidad de las mismas, ya que muchas de ellas son de capital extranjero. Puede leer:  La floresta del odio

La situación no es distinta en las medidas de apoyo a empresas y autónomos, ya que el gobierno socialista en lugar de bajar impuestos, eliminar trabas administrativas, y crear un entorno óptimo para facilitar la creación de pequeñas y medianas empresas en pequeñas poblaciones rehabilitando el desaparecido tejido industrial regional, vuelve a elegir la usura mediante avales, y la creación de pesebres dependientes mediante ayudas directas a los sectores productivos supuestamente más afectados, sin olvidar, claro está, la inculturización mediante el apoyo a un sector cinematográfico más preocupado en difundir falsas ideologías y homosexualizar al pueblo que en elevar su nivel cultura.

Pero sin duda, las medidas más clarividentes para descubrir la traición del PSOE son las destinadas supuestamente al apoyo de los trabajadores y personas más necesitadas. Como era previsible ninguna mención encontraremos al apoyo de las familias, pues ya sabemos que el progresismo profundamente revolucionario solo concibe a la persona individual en su ámbito productivo como trabajador, olvidando que la célula básica de cualquier sociedad sana es la familia. Como en otras ocasiones, en lugar de poner coto a los despropósitos bancarias, las medidas guardan silencio sobre temas tan importantes como eliminar o limitar los intereses hipotecarios, o proteger el patrimonio familiar convirtiendo en inembargable la vivienda familiar, al igual que no se adopta ninguna medida para facilitar la construcción de vivienda pública, o para favorecer el retorno a los pequeños núcleos de población, sino únicamente se decide limitar la subida de precio de los alquileres. Igualmente se siguen favoreciendo los ERTES, es decir, se sigue favoreciendo el mantenimiento comatoso e ilusorio de un tejido industrial improductivo, manteniendo ociosos a miles de trabajadores que quedan sometidos a la dependencia económica de la administración. 

Y evidentemente como no podía ser menos en una sociedad donde el raciocinio ha dejado paso al sentimentalismo el Real Decreto Ley aprobado no podía dejar de incluir medidas específicas para los desplazados ucranianos, y todo esto mientras el gobierno sigue haciendo caja con la venta de armamento al corrupto gobierno títere ucraniano.

Tal y como Fernández- Cruz anticipó el PSOE sigue «desmontado el armazón del sistema de derechos de los trabajadores», sigue destruyendo el legítimo patrimonio familiar manteniendo e incrementando impuestos expropiatorios, y sigue empecinado en gastar miles de millones para engrosar los ya abultados beneficios de los grandes capitales, sin afrontar las medidas necesarias para eliminar el parasitismo de la administración pública, para lograr la independencia energética de España, para rehabilitar la España rural, y para fortalecer a la familia como institución básica de la sociedad. 

Por Carlos Pérez- Roldán y Suanzes

https://www.tradicionviva.es/2022/04/29/es-socialismo-sin-careta/

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